El Malecón Tajamar es uno de esos lugares en Cancún que, aunque pasa desapercibido para muchos turistas ya que suelen adentrarse únicamente en la Zona Hotelera, ofrece una experiencia única. Ubicado en pleno centro de la ciudad, frente Plaza Las Américas, este malecón es un pequeño oasis verde donde la naturaleza se encuentra con la tranquilidad, proporcionando un respiro del bullicio urbano. Rodeado de manglares y con vistas a la laguna Nichupté, es el lugar perfecto para quienes buscan relajarse en medio del ajetreo de Cancún.
Este lugar es mucho más que un simple paseo peatonal: es un refugio natural lleno de vida y diversidad. A lo largo de su recorrido, puedes ver una variedad de especies, desde aves locales hasta reptiles como iguanas que caminan a su aire entre los árboles y las rocas. Es el sitio ideal para los amantes de la naturaleza que disfrutan observando la fauna en su hábitat natural y admirando los paisajes tranquilos.
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El Malecón Tajamar es hogar de una rica biodiversidad, algo que lo hace aún más especial. Si eres amante de la naturaleza, estarás encantado de ver a las aves locales, iguanas y hasta cocodrilos, los cuales suelen posar como una especie de atracción para el turismo.
Estos animales, que se sienten cómodos en su entorno, hacen de cada visita algo memorable. Además, las iguanas se pasean por el malecón, tomando el sol y sin preocupación alguna por la presencia de los visitantes, lo que ofrece una oportunidad única para observarlas de cerca.
El malecón no solo alberga a las aves y reptiles, sino que también cuenta con una rica variedad de flora que crea un ambiente verde y acogedor. Las especies de manglares que bordean el malecón son fundamentales para el ecosistema local, ya que ayudan a filtrar el agua y a mantener el equilibrio ecológico de la zona. Además, los árboles que crecen en el malecón proporcionan sombra y refugio tanto para los animales como para los visitantes, ofreciendo un lugar fresco para disfrutar de la naturaleza.
No es raro ver cómo algunas aves se posan en los árboles, mientras las iguanas se mueven lentamente sobre las piedras, creando una escena perfecta para quienes buscan conectar con la naturaleza. Si eres un fotógrafo aficionado, este es un excelente lugar para capturar imágenes de la fauna, las plantas y los hermosos paisajes que rodean la laguna. La calma del lugar y la variedad de especies te permitirán disfrutar de una experiencia auténtica de observación de la vida silvestre.
Aunque el Malecón Tajamar puede disfrutarse en cualquier momento del día, hay dos momentos en los que el lugar brilla realmente: el amanecer y el atardecer. Durante estas horas, el ambiente es más tranquilo y sereno, lo que te permitirá disfrutar del malecón sin las multitudes de turistas. Además, estos dos momentos ofrecen una luz natural que hace que el paisaje sea aún más impresionante.
Al amanecer, el malecón ofrece una experiencia de paz absoluta. El aire fresco de la mañana, combinado con la calma del lugar, crea un ambiente perfecto para un paseo relajante. El sol comienza a elevarse, iluminando la laguna Nichupté con tonos suaves de rosa y naranja, un espectáculo que definitivamente vale la pena presenciar. Este es un excelente momento para tomar fotografías del paisaje y de la fauna, ya que la luz suave y el ambiente sereno ofrecen las mejores condiciones para capturar imágenes de la naturaleza en su máxima expresión.
El atardecer en el Malecón Tajamar también es igualmente impresionante. A medida que el sol se oculta, el cielo se tiñe de colores cálidos, creando una atmósfera mágica. Los reflejos del sol en la laguna crean un espectáculo visual único, mientras las sombras de los manglares se alargan sobre el agua. Si prefieres una experiencia más relajada, este es el momento perfecto para dar un paseo, sentarte en uno de los bancos y simplemente disfrutar del momento. El sonido suave del agua y la brisa fresca hacen que este sea un lugar ideal para desconectar y disfrutar de la belleza natural que Cancún tiene para ofrecer.
El clima de Cancún es otro factor que hace del Malecón Tajamar un destino ideal para relajarse. Gracias a su cercanía con la laguna Nichupté, el malecón cuenta con una brisa refrescante que suaviza el calor tropical, incluso durante los meses más cálidos. Esto hace que cualquier momento del día sea agradable para caminar o pasar tiempo al aire libre.
Si bien el clima es cálido durante todo el año, la mejor época para visitar es durante la temporada seca, ya que, en épocas de lluvia, que suelen ser aproximadamente de mayo a octubre no se puede apreciar del todo.
El Malecón Tajamar no es solo un destino para los amantes de la naturaleza, sino también para quienes buscan un lugar tranquilo donde relajarse o hacer ejercicio. Las amplias pasarelas lo hacen accesible para todos, desde caminantes hasta personas en bicicleta o aquellos que simplemente desean sentarse a disfrutar del entorno. La proximidad al centro de Cancún facilita el acceso, por lo que no necesitas desplazarte lejos para llegar a este espacio natural.
Además, el malecón es perfecto para quienes disfrutan de caminar al aire libre, hacer ejercicio o incluso practicar yoga. Muchas personas se acercan por la mañana para aprovechar la frescura del aire y la calma que ofrece el lugar. También es un lugar popular para los que buscan desconectar después de un día de turismo, ya que ofrece un ambiente mucho más relajado que las áreas más turísticas de la ciudad. Si prefieres una actividad más tranquila, puedes simplemente sentarte a leer un libro o disfrutar del paisaje, rodeado de naturaleza y lejos del ruido de la ciudad.
Si planeas visitar el Malecón Tajamar, aquí van algunos consejos prácticos para aprovechar al máximo tu experiencia. Primero, no olvides llevar agua y protector solar, ya que, aunque el malecón tiene sombra natural en algunos árboles, es importante mantenerse hidratado, especialmente durante los días más cálidos. También, si te gusta la fotografía, no olvides tu cámara, ya que el malecón ofrece múltiples oportunidades para capturar la belleza del lugar y su fauna. Las aves, las iguanas y los paisajes que te rodean serán excelentes sujetos para tus fotos.
Es recomendable visitar durante las primeras horas del día o al final de la tarde, cuando el clima es más fresco y el ambiente está más tranquilo. En estos momentos, el malecón no solo es más agradable, sino que también te permitirá disfrutar de un paisaje más espectacular. Además, si visitas el malecón temprano, tendrás la oportunidad de disfrutar de la fauna más activa, como las aves que empiezan a salir en busca de alimento.